Este jueves 3 de junio se llevó a cabo una jornada informativa sobre la marca Alimentos del Paraíso. Esta nueva actividad del proyecto La Panera d’Asturies se realizó presencialmente en las instalaciones del Clúster Agroalimentario ASINCAR y también se posibilitó la asistencia telemática.
La jornada fue introducida por Antonio Palacio, director de ASINCAR, que presentó la iniciativa de La Panera d’Asturies e introdujo la marca Alimentos del Paraíso. El ponente remarcó la función de esta marca como un paraguas bajo el que se aglutinan variados productos agroalimentarios del Principado de Asturias. El objetivo, como dejó claro Antonio, es asociar estos productos con la región asturiana, sus valores y su naturaleza de calidad.
Begoña López, directora de Desarrollo Rural y Agroalimentación, fue la encargada de explicar la historia de la marca y el trabajo que le destina la Administración. Begoña explicó cómo, aprovechando el buen trabajo hecho por Turismo, asociaron esa marca tan reconocida también a los productos agroalimentarios. Con esta ruta, Alimentos del Paraíso ha pasado de tener 17 operadores en 2018 a los 347 en la actualidad.
Vidal Francisco Álvarez fue el tercero de los ponentes. Como jefe de servicio de Desarrollo Agroalimentario recalcó el esfuerzo que supone sacar adelante sellos de Identificación Geográfica Protegida (IGP) y de Denominación de Origen Protegida (DOP) y cómo una marca como la de Alimentos del Paraíso puede ayudar a reforzar estos sellos, además de la presencia de otros productos que no tienen por qué tenerlos. Vidal añadió también que la marca aporta prestigio regional, riqueza y empleo a la comunidad autónoma.
A la ponencia de Vidal se sumó la de Mayte Villastrigo, coordinadora de ASINCAR, para hablar sobre las condiciones que debe cumplir el productor para obtener el sello de Alimentos del Paraíso. Según explicó Mayte, el proceso para entrar en la marca consiste en adherirse a un pliego técnico de requisitos, ya sea al de una IGP, de una DOP, de un producto ecológico o a uno privado, y pasar una inspección de un organismo de control para comprobar que se cumplen estos requisitos. Este último control solo se realiza en caso de no estar adherido a una IGP o DOP, ya que estas tienen sus propios organismos de control. Tras estos pasos, el productor que quiera entrar en la marca solo tendrá que tramitar su solicitud.
La jornada se cerró recordando que se está trabajando en nuevos pliegos dentro de la marca, lo que permitirá que puedan sumarse más productos, como es el caso del aprobado para las conservas de pescado. También se produjo una ronda de preguntas, tanto de los asistentes online como presenciales, tras la cual se generó un debate sobre los requisitos para adherirse a la marca y las posibilidades de futuro que esta pueda tener.